Edgar Martirosyan es el nombre del afortunado repartidor que recibió nada menos que 1000$ por su servicio durante la gala de los premios Oscar.
El joven apareció por sorpresa con tres cajas de pizza y una gorra roja en la gala.
Al finalizar de comer las pizzas Ellen DeGeneres pasó el sombrero para recoger las propinas. El resultado fueron 600$ a los que ella añadió 400$ más para hacer los 1000$ que personalmente le entregó dos días después en su programa de Tv.
"Me dijeron que iba a entregarlas a los escritores, luego apareciste tu y me dijiste que te siguiera ... y yo me dije ... vamos allá"